Desapego estrella de la siesta que zumba
cuando la hierba dice
mariposas.
Sublimación de la antífrasis, 2024
Gabriel Roel
Desapego estrella de la siesta que zumba
cuando la hierba dice
mariposas.
Sublimación de la antífrasis, 2024
En lo sinuoso de las diéresis los tildes sin nomenclatura.
Quién eres sino quien viene a lo raro que aparece donde
la voluntad se templa, iris de la Hélade, hasta platinarse
como quien dice amanece, cisterna, antílope, Alter ego.
Sublimación de la antífrasis, 2024
Carrillo Puerto en la hora del pequeño guijarro
a tres ventanas. Asunto pateado por despliegues
con lo caminado. Desbaratado aquello hecho de
una que sepamos todos.
Sublimación de la antífrasis, 2024
De algunos sitios sobre algunas comarcas
entre esteros por los relieves táctiles de lirios,
arados por horquetas en los silbos de silencio,
fundidos a techo con sus casas chorizo.
Mecedoras lentejuelas de los sauces.
La lluvia del verano es un bombo de pedal
con chaschas de pezuña como chapitas antes
de hundirse al bleque que junta las calles.
Ese tiempo sin cabras de disolverse siesta.
Sublimación de la antífrasis, 2024
Por súbito que fuera este jale fue micro.
Micro envoltura sismo del existir a nuevo
con lo que antes dolor siquiera en dizque
espabilar palomas en la letra del hangar
cineteca. Discos por nidos de preguntas
del inquietante suelo de las transparencias.
Donde la opacidad junta del silencio estelar
aquellas lealtades sencillas que mitigan el
jalón amortiguado ripio del calígrafo.
Palanca al medio marea de los cambios a la
altura del brazo que la barranca en ami ocho
familiar anochece rayando lo marítimo.
Y la ciudad por su neta rodante sin réplicas
entrena. Ola por olas barrenadas del swing
en los peseros.
Sublimación de la antífrasis, 2024
Encestadas las sílabas en el cinc lo que navega es aquel punto.
Un timbre que florece.
Sublimación de la antífrasis, 2024
Un así mar de Cortés antes del Pacífico.
Arena hacia el punto sin ojos de la fuga.
Sublimación de la antífrasis, 2024