No hay santo del sentido.
Hay un ahora que abre
suspensivo los supuestos.
A pie de las batallas.
Sublimación de la antífrasis, 2024
No hay santo del sentido.
Hay un ahora que abre
suspensivo los supuestos.
A pie de las batallas.
Sublimación de la antífrasis, 2024
En el pétalo raya de la noche
de la palabra hiato, en su halo
abisal de altitud, ensimismado.
Predio sin escalón preciso que llegue,
asterisco, ni lo espere ni vuele vuelto
de universo.
Sublimación de la antífrasis, 2024
La mañana emerge de la niebla del
sudor que la corta insoluble y abre
sus templados la ciudad que corro.
Ajusco de los gajos florecido
ese mudo que el trece de Trilce
hizo una ola.
Edad del mediodía, 2023
¿Vienen del arado aquellos cauces hechos de tempo que abren
en la tierra los misterios que no son ella, pleonasmos lugares que
se ignoran? Cincho por riendas que por soga destripan las esencias.
Como cuando se descubre lo perenne por sus bordes de magma
erosionado. Provisorio musgo de la palabra en los espinos.
Edad del mediodía, 2023
La porfía del libro por su dedicatoria que la cámara
enseña junto al fuera íntimo de foco por sus registros
idos, orilla del amor, imaginario sin espejo entre reales
desmembrados sintaxis. La dictadura de miedo del caudillo
en la maldita circunstancia de transpirar por todos lados.
Y un cableo de aquello franqueable a las ardillas. Corazón,
azotea, de los nidos. Nubes dejadas luz en las terrazas que
la lluvia disipa con la niña de las tórtolas en lo que tardece
verano que rumora.
Edad del mediodía, 2023
ז״ל
Lo que hace vecindad arrima lo que no se apuntala, ni se aprehende
pantalla, bouquet de los enigmas. En la discreta combustión de los
decires. Don de su iridiscencia.